Cecilia Durán Mena

2 weeks ago | meer.com | Cecilia Durán Mena

In 2001, a very interesting document was published that caught the attention of entrepreneurs, executives, academics and students: The Agile Manifesto, which was proposed by a group of software programmers who were looking for a more fluid, faster and more flexible dynamic to operate businesses. All these ideas that captivated at that time, that aroused so much curiosity and generated avant-garde, today have received a death sentence. What happened?

3 weeks ago | forbes.com.mx | Cecilia Durán Mena

Imagino que desde que el mundo es redondo, la mente humana ha tratado de descifrar cuál es la forma del éxito. Ojalá hubiera una receta universal que se pudiera aplicar en todo tiempo y lugar. No hay tal. Cada circunstancia está rodeada de variables que nos llevan a tomar decisiones. Son las elecciones que tomamos las que nos permiten llegar o no a la meta. No obstante, sabemos que lo que funcionó una vez, quizá no sirva para la siguiente.

3 weeks ago | periodicocorreo.com.mx | Cecilia Durán Mena

Imagino que desde que el mundo es redondo, la mente humana ha tratado de descifrar cuál es la forma del éxito. Ojalá hubiera una receta universal que se pudiera aplicar en todo tiempo y lugar. No hay tal. Cada circunstancia está rodeada de variables que nos llevan a tomar decisiones. Son las elecciones que tomamos las que nos permiten llegar o no a la meta. No obstante, sabemos que lo que funcionó una vez, quizá no sirva para la siguiente.

4 weeks ago | periodicocorreo.com.mx | Cecilia Durán Mena

Habemus Papam. La noticia que muchos católicos esperábamos y que el mundo entero aguardaba, por fin, llegó: hay papa. Se descorrieron las cortinas del balcón central para dejar ver la figura de quien ya es el sucesor de Francisco y en última instancia de Pedro. Las plegarias de los feligreses fueron escuchadas y después de cuatro rondas, tuvimos un papa electo. Sorpresa, eso sí. Tenemos un papa estadounidense. Y ese papa fue el cardenal Robert Francis Prevost.

1 month ago | forbes.com.mx | Cecilia Durán Mena

No me cabe la menor duda, sustituir a un gran líder es, probablemente, una de las tareas más ingratas y delicadas a las que puede enfrentarse cualquier ser humano en la vida pública o privada. Incluso, si ese sucesor fue mentorado del que ya no está, si fue elegido por el que ya no está, la tarea es sumamente delicada y siempre queda la sensación de que el que se fue era un titán y que quien llega no podrá llenar sus zapatos.