
Javier González-cotta
None at Diario de Sevilla
Articles
-
1 month ago |
diariodesevilla.es | Javier González-cotta
Pudiera ser que La Internacional no sea ya un himno para socialistas y comunistas de nostálgicos salones. Ahora es el himno de los macarenos. De la famélica legión hemos pasado a la nutrida procesión. Nada más internacional que la Macarena. No me refiero al hit de Los del Río, que siguen de exitosa gira con su batucada a las sevillanas maneras. Hablo del ecumenismo macareno, lo que une al mundo por la devoción a la Esperanza Macarena.
-
1 month ago |
diariodesevilla.es | Javier González-cotta
Cuando uno se resiste a hablar de algo por temor a ser pesado, acaba hablando de ello y se convierte en un pesado doblemente inevitable (para los demás y hasta para uno mismo). Por eso yo he venido hoy a hablarles de mi libro y, por tanto, de la lluvia en Sevilla. Escribo este parte personal sobre el tiempo, pero en mitad de una tregua de sol. Arriba lucen ahora unos cielos purísimos, casi límpidos. Piden como un rompimiento de gloria.
-
1 month ago |
english.elpais.com | Javier González-cotta |Natalia Marcos
He rarely smiles — no more than a fleeting sketch. He even seems somewhat sullen. Perhaps it’s the weight of taciturn bile, lingering insomnia, or the awareness of being outmatched — or maybe simply the feeling of being misunderstood amid compliments and congratulations. At times, he is seen in a trench coat, a relic of the post-war era, with his civil servant-like glasses, blending into his drab existence.
-
1 month ago |
elpais.com | Javier González-cotta
Suele sonreír poco, no más allá de un esbozo. Parece hasta un punto hosco. Quizá todo sea cosa de la bilis taciturna, o del insomnio, o de saberse sobrepasado o tal vez malentendido entre halagos y felicitaciones. A veces, también, se le ve con gabardina, tocado con mascota de posguerra y con sus gafas como de funcionario, adaptado a la gris existencia.
-
1 month ago |
diariodesevilla.es | Javier González-cotta
Este viernes 14 de marzo, bajo la cuaresma y la lluvia, se cumplen cinco años de la falsa expiación. El coronavirus nos confinó previa alocución de Sánchez el guapo. Cinco años después de aquello, hemos aprendido lo suficiente: nada. Se dijo que el mundo purgaría su soberbia. La pandemia era una brutal lección contra el exceso y la vanidad. El esputo de un enfermo pudo con la globalización.
Try JournoFinder For Free
Search and contact over 1M+ journalist profiles, browse 100M+ articles, and unlock powerful PR tools.
Start Your 7-Day Free Trial →