Rosa Ileana Boudet

Jul 11, 2024 | cubaencuentro.com | Manuel Desdin |Luis Manuel Rafael |Abilio Estévez |Rosa Ileana Boudet

El tocayo —como nos llamábamos el uno al otro— se ha ido sin molestar; coherente con su estilo de intentar pasar desapercibido para no perder tiempo, evitar polémicas estériles y consagrarse al buceo inteligente de la República cubana, el teatro, el cine y la literatura de cualquier lado, siempre que lo conmovieran y fueran útiles.

Jul 11, 2024 | cubaencuentro.com | Manuel Desdin |Abilio Estévez |Rosa Ileana Boudet |Gustavo Perez Firmat

Después de muchos años como editor, puedo afirmar que hay pocos autores capaces de sorprenderme. Una de esas excepciones ha sido Carlos Espinosa. Cuando comenzó a colaborar con Verbum, ya traía consigo una larga y distinguida trayectoria académica. Sin embargo, fue al iniciar la edición de un par de libros que nos propuso, cuando descubrí su extraordinaria capacidad de trabajo y seriedad.

Jul 11, 2024 | cubaencuentro.com | Manuel Desdin |Luis Manuel Rafael |Rosa Ileana Boudet |Gustavo Perez Firmat

Obra, Carlos Espinosa, RecuerdosNunca he visto alguien más cuidadoso y metódico que Carlos. Trabajaba siempre, sin cansancioEnviarImprimirCarlos Espinosa era un imprescindible. El minucioso orden que llevaba hasta en los más pequeños y cotidianos hechos de la vida, lo llevó a salvar escritores y obras que parecían condenadas al olvido.

Jul 10, 2024 | cubaencuentro.com | Manuel Desdin |Rosa Ileana Boudet |Gustavo Perez Firmat |Carlos Dominguez |Carlos Domínguez

Desde que me enteré, muy temprano, del triste final de Carlos, no puedo desprenderme de los recuerdos deshilvanados en tantos años de amistad.

Jul 10, 2024 | cubaencuentro.com | Manuel Desdin |Carlos Dominguez |Carlos Domínguez |Carlos Perez |Carlos Pérez |Rosa Ileana Boudet

No llegué a conocerlo lo suficiente para decirle “Carlitos”. De hecho, si la falible memoria no me falla esta vez, nunca nos vimos. Y no obstante fuimos amigos a lo largo de treinta años, una de esas amistades a distancia que a veces son las más necesarias. La primera vez que hablamos yo estaba en mi casa en North Carolina, igual que ahora, sentado en este mismo butacón. Corrían los años 90.