
Vicente Soriano
Editor at Revista Central
Articles
-
2 weeks ago |
letralia.com | Vicente Soriano
Lo que sucede en los animales irracionales lo descubrirás en el hombre: nos sentimos perturbados por cuestiones baladíes y vanas. Séneca, Sobre la ira. Aquella mañana hacía un frío inusual para estas latitudes. Llevábamos varios días sufriendo una temperatura gélida, casi polar. Las montañas cercanas se habían cubierto de nieve. Por eso mismo muchos colegios comenzaban a programar, a toda prisa, viajes a las pistas de esquí. Los niños, exultantes, saltaban de alegría.
-
3 weeks ago |
letralia.com | Vicente Soriano
Así como la insensatez nunca está satisfecha, por más que se le conceda todo lo que desee, la sabiduría se contenta con lo presente, nunca se disgusta consigo misma. Michel de Montaigne, Nuestros sentimientos se arrastran más allá de nosotros. Aquel día me entraron ganas de gastarle una broma a mi querido vecino, sabiendo que ni se iba a molestar, ni lo iba a tomar a mal. Por el contrario, la inocente broma, con toda seguridad, daría paso a un diálogo regado con un buen vino. No me equivoqué.
-
4 weeks ago |
letralia.com | Vicente Soriano
Tan pronto, señora, se va el cordero como el carnero; ninguno es tan viejo que no pueda vivir un año, ni tan mozo que hoy no pudiese morir. Fernando de Rojas, La Celestina. En más de una ocasión, siempre acompañados por una botella de excelente vino, mi amigo y vecino, y yo, hablamos de la muerte. Al principio, cuando la nombró por primera vez, me dio la impresión de que trataba de conjurarla haciéndola llevadera, familiar.
-
1 month ago |
letralia.com | Vicente Soriano
Dime, ¿has visto las pisadas de los días? Francisco de Quevedo, El mundo por de dentro. Estaba lloviendo a mares. Tras recrearme durante largos minutos viendo las cortinas de agua moviéndose a derecha a izquierda, y a los coches reflejando sus luces sobre el bruñido asfalto, bajé a visitar a mi buen amigo y vecino. Se hallaba, cómo no, enfrascado en la lectura de un voluminoso libro. —Hay cosas —me dijo tras cerrar el libro y sacar la consabida botella de vino— que no se comprenden.
-
1 month ago |
letralia.com | Vicente Soriano
Haec tua Penelope lento tibi mittit, Vlixe; nil mihi rescribas attinet: ipse veni!Virgilio, Heroides. Era sábado. Me desperté temprano. Debajo de mi casa, frente a la ventana de mi dormitorio, hay una clínica de prevención. Hacen análisis a los trabajadores de distintas empresas. Había una nutrida cola durante la pasada pandemia. Esta clínica tiene una larga y estrecha pantalla, con su nombre, a lo largo de la fachada. Ésta se enciende, automáticamente, a la seis de la mañana.
Try JournoFinder For Free
Search and contact over 1M+ journalist profiles, browse 100M+ articles, and unlock powerful PR tools.
Start Your 7-Day Free Trial →